En esta 32 Subida de Haría. El piloto del Skoda Octavia WRC hizo bien en autoimponerse un ritmo muy alto desde la primera toma de contacto con los 8,5 kilómetros de esta rampa del norte de Lanzarote, ya que los tiempos de entrenamientos acabarían por ser los que definieran esas primeras posiciones. Machín se hizó en esta manga de ensayos con un crono de 4:43.785, más de 17’’ mejor que un Alexis Romero que empezaba a apuntar maneras.
Pero fue la primera oficial la que alteró el devenir de esta Subida de Haría. Francisco Lemes, que volvía a subirse en el Ford Escort WRC desués de mucho tiempo y que sólo había podido ser séptimo en entrenamientos sufría una aparatosa salida de carretera en la que perdía las dos ruedas delanteras de su coche. Lo que algunos preveían como un posible duelo de cara a la victoria absoluta en turismos quedó interrumpida súbitamente, ya que Francisco Lemes se veía abocado al abandono.
Tanto Machín como su hijo, Yeray Lemes, se encontraban al veterano lanzaroteño en el trazado, por lo que de acuerdo con el artículo ocho del campeonato correspondiente del anuario de la FCA, el crono de entrenamientos pasaba a tener validez para estos dos pilotos. Curiosamente, en ambos casos este tiempo sería el que, a la postre, constaría como el más rápido del cómputo global de la prueba.
En el caso de Jesús Machín porque en la segunda ascensión un despiste le llevaba a sufrir la misma suerte que el otro WRC inscrito. Nueva salida –en este caso leve- de carretera y la imposibilidad de llegar a una meta maldita para los dos favoritos. Aún así, su superioridad era tan clara, que esa primera tentativa de entrenamientos era suficiente para ganar una vez más en Haría, esta vez, con 13,3’’ sobre otro Skoda Octavia, el Kit Car de Alexis Romero.
El piloto local completó una gran subida y en su caso sin ningún imprevisto más allá de una floja segunda manga. Romerto terminó justo por delante del grancanario Jonathan Suárez, vencedor de grupo N con el Mitsubishi Lancer Evo VIII y nuevo líder del campeonato provincial de Las Palmas. Aunque para ello debió sudar tinta, ya que el joven Rubén Curbelo, en su primera carrera con un Mitsubishi Lancer Evo VIII de grupo N, fue cuarto absoluto a menos de un segundo de Suárez. Excelente papel de un Curbelo que saldaba así con nota su primer examen con un vehículo de gran calibre tras hacer manos con un Nissan Micra.
Josué González y Yeray Guadalupe, con sendos Renault Mégane Coupé, protagonizaron un duelo habitual de la pasada temporada, con ventaja para el primero, justo por delante de Yeray Lemes, al que también le sirvió el tiempo de entrenamientos tras un problema mecánico en la última manga. Se esperaba mucho del joven lanzaroteño con el mismo Honda Civic con el que ya fue segundo en el Rally de Maspalomas, pero esta vez la mecánica no acompañó. Aún así, su participación en Haría tenía un único objetivo, el de recuperar el ritmo de carrera de cara al Rally de Bulgaria.
Jesús María Lemes dio la sorpresa
Las diez primeras posiciones la completaron José González (BMW 325i), Camilo González (Honda Civic Type-R) y el palmero Iván Martín (Honda Integra Type-R). En el Campeonato de Promoción “Talleres Multimarca Enma”, Jesús María Lemes se llevó finalmente el gato al agua con el Renault Clio Williams, apenas un par de décimas por delante del Citroën Saxo VTS de Aythami Afonso, tras los registros de la primera manga oficial. Un dato a destacar, y tras el accidente del vehículo número 30, fue que los participantes prácticamente no tuvieron opción de rebajar sus cronos previos, de ahí la importancia que tuvieron en esta edición los primeros registros.
En la modalidad de Barquetas el único participante era el piloto local Omar Martín. Con un caso similar al de Machín, Martín aprovechó su registro de 4:50.068 en entrenamientos para clasificarse y vencer, ya que en la manga final empeoraba su mejor crono prácticamente en una veintena de segundos.
fuente:www.motorenlinea.es
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